El laboratorio dirigido por John Rogers en la Universidad de
Illinois trabaja desarrollando productos tecnológicos más propios de la ciencia
ficción que de la realidad. Una de sus más sorprendentes creaciones es un
circuito electrónico 100% soluble, el cual podría ser usado para monitorear el
medio ambiente sin contaminarlo o como dispositivo médico. Es que este circuito
desaparece por completo cuando ya no es más necesario.
Y es que si alguna vez has abierto un teléfono móvil, has podido pensar que sus partes son aún demasiado grandes para la época en la que estamos, aunque según el Profesor John Rogers de la Universidad de Illinois, nos muestra algo de su investigación, y, quizás dentro de poco, todos estos elementos que componen estos dispositivos puede que sean capaces de llegar a ser tan delgados como el papel, y por lo tanto seremos capaces de tener el teléfono en nuestra propia piel.
Sobre el Profesor
El profesor John A. Rogers obtuvo una licenciatura en química y en física en la Universidad de Texas, Austin, en 1989. Desde el MIT, recibió grados SM en física y en química en 1992 y el doctorado en química física en 1995. De 1995 a 1997, Rogers fue un Junior Fellow en la Society of Fellows de la Universidad de Harvard. Durante este tiempo también desempeñó el papel de fundador y director de Active Impulse Systems, una empresa que comercializa las tecnologías desarrolladas durante su trabajo de doctorado. Se unió a los Laboratorios Bell como un miembro del personal técnico en la materia del Departamento de Investigaciones de Física Condensada en 1997, y fue Director de este departamento desde finales de 2000 a 2002.
Actualmente ocupa una Cátedra Swanlund, la posición más alta bajo la presidencia de la Universidad de Illinois en Urbana/Champaign. Desempeña un papel principal en el departamento de ciencia de los materiales e ingeniería, con citas comunes en los departamentos de química, bioingeniería , ciencias de ingeniería mecánica e ingeniería Eléctrica y Computación. Desempeñó su labor como director de la Nanoscale Science y Engineering Center (centro de ingeniería en nanofabricación), desde el período 2009-2012. Actualmente es director del Seitz Materials Research Laboratory.
Sobre sus investigaciones recientes
Este hombre ha encontrado o abierto un nuevo camino, y se ha percatado de que con un poco de material en la piel puede formar una placa muy delgada, como en el que aparecen en las imágenes con pintura. Algo parecido al grafeno, esto que puede que casi no tenga sentido, es que increíblemente es resistente al desgaste del agua, e incluso la piel y el músculo, incluyendo estiramientos y flexiones de estos, ha comprobado que no afectan a su función. Cada material impreso sería capaz de tener una duración de dos semanas en nuestra piel o músculos, tras pasado este tiempo se caería naturalmente.
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